Minutos después de darse a conocer la decisión de la Cámara de Diputados de rechazar el pedido de juicio político a Mario Abdo Benítez y Hugo Velázquez iniciaron los disturbios en la zona del microcentro capitalino.
Un grupo numeroso de manifestantes fue dispersado por efectivos antimotines de la Policía Nacional mediante gases lacrimógenos y balines de goma.
A partir de allí, empezó una batalla campal que se extendió por varias calles del centro de Asunción, dejando a su paso una serie de destrozos a edificios, oficinas y vehículos.
Algunos locales comerciales ubicados en Asunción Supercentro fueron saqueados por personas desconocidas que habrían formado parte del grupo de manifestantes. Los escaparates de una de las tiendas quedó totalmente vacías tras este hecho.
Dos vehículos que se encontraban estacionados en la intersección de las calles Eligio Ayala y Caballero fueron incendiados por desconocidos. Previamente, se procedió a saquear uno de ellos, según videos compartidos por un testigo.
Varios edificios quedaron con destrozos en sus fachadas y algunos en el interior luego de estas manifestaciones que nuevamente habrían tenido a infiltrados participando, siendo éstos señalados como los responsables de los actos vandálicos.
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