Imágenes del circuito cerrado revelan el momento en que el cuerpo de Diego Olivera Cabrera, uruguayo, de 36 años, fue arrojado de una camioneta de alta gama, sin importar que en el sitio incluso se registraba un fluido tráfico en dicha intersección. Vecinos testificaron que minutos antes se escucharon disparos en la zona. El asesinato habría ocurrido en el interior del vehículo.
Tras la llamada a la oficina de guardia de la Comisaría 10ma, acudió personal policial que encontró al hombre sin signos de vida con rastros de disparos de arma de fuego con orificio de entrada y sin salida a la altura del brazo, pecho y espalda lado izquierdo.
Migraciones no registra el ingreso del ciudadano uruguayo a nuestro país. Intervinientes no descartan que el hecho tenga relación con la megacarga de cocaína incautada en Villeta.
De acuerdo al relato de vecinos, se observaron dos vehículos de color blanco pasando por el lugar uno tras otro. Desde el primero se vio cuando se arrojó el cuerpo sin vida para luego darse a la fuga. Se presume que el ciudadano uruguayo residía en la zona.
Acudieron al lugar la fiscala Luciana Ramos, además del médico forense Héctor Meza, quien diagnosticó como probable causa de muerte shock hipovolémico por herida de arma de fuego. Posterior a la inspección, la fiscala ordenó el levantamiento del cadáver y traslado hasta la morgue judicial.
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