Ante esta realidad, la Unión Nacional de Centros de Estudiantes del Paraguay, (Unepy), realizó un comunicado explicando que aunque escuelas y colegios cerraron sus puertas hace ya un mes, el sistema educativo en este tiempo de dificultad y tanta buena voluntad de docentes y estudiantes, puede ir adelante.
“A pesar de la sustancial ausencia del MEC, que parece estar más concentrado en fotografiar al Ministro Petta distribuyendo kits alimentarios en Asunción (porque en el resto del país no hay aunque sea eso), entre otras cosas.
Gracias a la estructura y extensión nacional de la Unepy, pudimos realizar un estudio que involucra a 236 colegios de la educación pública y privada subvencionada, diseminados en todo el país (el 10% del total de los colegios), que incluye tanto Asunción cómo los 17 departamentos.
De esta manera hemos podido descubrir que docentes y estudiantes a lo largo del país se han organizado como podían y están dando clases de forma virtual”, afirman.
La “famosa” plataforma del MEC, sin embargo, actualmente es utilizada en menos del 18% de los colegios, mientras que WhatsApp domina tanto como herramienta principal, en el 50% de los colegios, que como herramienta de apoyo a un conjunto de otras herramientas (zoom, pdf, classroom, etc.) en otro 20% de los colegios.
Finalmente en un 12% de los colegios se utilizan, según su posibilidad, diferentes herramientas: libros (donde hay), Word, pdf, zoom, etc.
“Además nuestros compañeros y compañeras nos han señalado que en el 56% de los colegios todo el estudiantado tienen acceso a las clases virtuales y siguen al docente (según la herramienta utilizada), pero también que en otro 44% de los colegios eso no ocurre. En una parte de estos últimos solo consigue participar de las clases virtuales una mayoría de los estudiantes, mientras que en otros ni siquiera ocurre eso”, aseveró el documento.
Los motivos de esta imposibilidad para participar son varios: falta de saldo para internet, falta de celulares, escasa señal en las zonas retiradas donde viven, etc.
“Pese a todo el abandono, el sistema educativo sigue adelante, aunque dejando de lado a una parte importante del estudiantado casi un 15-20%, que por diferentes motivos no pueden acceder a las clases virtuales, o pueden solo esporádicamente, y que por eso se arriesgan seriamente a perder el año o a abandonar definitivamente el sistema escolar, algo que consideramos grave e inaceptable”, agrega.
Frente a esta realidad lo que choca es la casi total ausencia del MEC que, a parte de los esfuerzos del Viceministro de la institución, para armar esa plataforma que nadie usa, resulta totalmente ausente del quehacer diario de la educación. Los docentes mismos cuentan de la ausencia absoluta de un esquema de trabajo, o de una coordinación académica.
En un mes lo que hubo desde MEC y su estructura (coordinaciones-supervisiones-direcciones) se ha reducido a tres frases: “hagan clases virtuales”, “utilicen la plataforma del MEC” y “pronto llegaran los cuadernillos para quien no tiene Internet”.
Pero sobre este último punto aparece el cuestionamiento hacia ese “pronto”, ¿cuándo es pronto?, si ya pasó un mes y se sigue sin respuesta.
“No es mucho por parte de una organización con una estructura difundida en el territorio nacional que tiene miles de funcionarios administrativos y pedagógicos. Habrán estado todos ocupados en hacer fotos a Petta.
Como estudiantes organizados agradecemos el esfuerzo de los docentes y solicitamos más compromiso y menos fotos al MEC.
En los próximos días presentaremos nuestras propuestas para que este año no sea un año perdido.
La lucha no continúa, la lucha continúa”, cerraba el comunicado.
UNA
También comunidad universitaria de la Universidad Naional de Asunción (UNA), realizó un comunicado a la opinión pública en el marco de la coyuntura económica, social y educativa ocasionada por la propagación del COVID-19 y las medidas sanitarias tomadas por el gobierno de turno.
En donde como estudiantes de la carrera específica de Economía se considera que las clases virtuales carecen de la misma calidad que las presenciales y que, dentro del contexto socioeconómico actual, no existe un ambiente propicio para continuar con su desarrollo.
“La falta de capacitación de los docentes para el uso de las plataformas virtuales y la dificultad de adaptar los contenidos teórico-prácticos que requieren mayores niveles de acompañamiento por parte del evaluador a este tipo de espacios, son factores que evidencian improvisación y falta de herramientas institucionales e imposibilitan que la orientación sea la mínima requerida”, asevera la estudiante Nahir Florentín, alumna del 7. ° semestre – Turno mañana de la Carrera de Economía.
El documento también destaca el acceso a las clases virtuales por parte de un gran número de compañeros se ve obstaculizado debido al costo adicional que se genera. La difícil situación económica que acarrea la mayoría de las familias complica, a su vez, cualquier pago arancelario y la asistencia a cualquier tipo de clases. Para aquellos compañeros que acceden a cualquiera de las plataformas (Hangouts Meets o Google Classroom) implica un costo mínimo estimativo de Gs. 25.000 semanal sin diferencia de la compañía telefónica contratada.
Resulta necesario solucionar estos problemas y dar absoluta cobertura de internet a los estudiantes de manera que la totalidad de los alumnos pueda acceder a las plataformas, en caso de proseguir con la modalidad actual.
APLAZAMIENTO DEL SEMESTRE
“Con base en estos argumentos, consideramos que no estamos en condiciones para el desarrollo de las clases, y que las prioridades de las autoridades, instituciones del Estado y toda la comunidad educativa en general, deberían focalizarse en combatir y superar la pandemia, asegurando la calidad de vida de los estudiantes y sus familias. Por estas razones. Instamos a las autoridades correspondientes a suspender el pago de aranceles correspondientes al Primer Periodo Académico 2020 hasta la completa normalización de las actividades académicas”, resalta el estudiantado.
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